Desde el punto de vista ecológico y alimenticio, el fruto del açaí constituye uno de los más valiosos tesoros de la región del Amazonas. El mercado del açaí se ha convertido en una significativa fuente de ingreso y ofrece a los pequeños campesinos una forma segura de subsistencia. Desde Pará hasta Putumayo, el açaí es visto como el motor de un desarrollo alternativo al cultivo de la coca.
Putumayo ha sido durante décadas una región bastante rezagada. Aquél pueblo que en algún momento vivió desgarradoras historias de violencia, está siendo uno de los motores del cambio, brindando nuevas oportunidades a los campesinos que por años solo encontraron sustento en el cultivo de la hoja de coca, o en actividades ilegales como el comercio ilícito de fauna o de madera.
Dicho esto, actualmente el açai es popular no sólo por sus beneficios, ya que tiene un contenido alto de antioxidantes, de vitaminas A, C y B, de grasas esenciales como el omega 3, 6 y 9 y proteínas; sino que también por las nuevas oportunidades que está brindando a los campesinos de la zona de Putumayo, quienes se han dado cuenta que cultivar açai es más rentable y menos peligroso que cultivar hoja de coca.
La demanda internacional y el precio local del açaí, hacen que este fruto sea visto como una fuente de vida. Ese vínculo entre el consumo de açaí en México, y la economía legal y sustentable en Colombia es un ejemplo de globalización virtuosa por lo medio de la cual podemos incidir positivamente en el planeta, por medio de lo que consumimos.
Vero Amore se compromete a impulsar estos procesos de consumo consciente, empoderamiento rural, y conservación ambiental, y por eso somos amor verdadero.
Recuerda que cada bowl de nuestro açaí ofrece a una familia de campesinos del Putumayo una alternativa al narcotráfico.
